Grasas? No, Gracias
© Vanda 2014
© HakaBooks.com, 2014
Aragón 368, 4º 2ª - 08009 Barcelona
Books@Hakabooks.com
www.HakaBooks.com
Edición y Diseño: HakaBooks e-Ditions
ISBN-13: 978-84-94253-73-7
Quedan prohibidos, dentro de los límites establecidos por la ley y bajo los apercibimientos legalmente previstos, la reproducción total o parcial de esta obra por cualquier medio o procedimiento, ya sea electrónico o mecánico, el tratamiento informático, o cualquier forma de cesión de la obra sin autorización escrita de los titulares del copyright.
Grasas?
No, Gracias!
by Vanda
A Pablo, el hombre que amo y con quien desde hace cuarenta y tres años caminamos juntos.
A nuestros tres hijos: Alejandro, Luciano y Kevin.
A mis padres que me dieron la vida.
A Julio, mi hermano.
A mis sobrinos y sobrinas.
A mis cuñadas.
A mi amiga del alma Trini, por hacer posible mi sueño al creer en mi libro.
A todos mis maestros, por sus palabras. Sus enseñanzas.
Gracias a todo el mundo.
Vanda
Gracias por haber elegido este libro
No soy escritora pero escribí estas páginas fluidamente, con tantas ganas y tanto amor, que quise compartir el entusiasmo y felicidad que me da toda la gimnasia interna y externa que realizo todos los días de la semana.
No sé si este libro te gustará o no… Pero sé que te hará pensar.
Y no es necesario estar de acuerdo…
Lo importante es que algo de estas páginas te movilice.
Yo logré cambiar hábitos a mi favor, y te aseguro que nadie me regaló nada. Cada cambio interno siguió esta secuencia en mí: lo deseé, lo busqué, muchas veces lo lloré y siempre terminé disfrutándolo.
Trabajé cada milímetro para un cuerpo y una actitud de vida sana y flexible.
Y aprendí a amarme por dentro y por fuera.
Si yo logré un cambio de actitud y de hábitos, tú también puedes.
Además, no te pido que seas… ¡¡¡trapecista!!!
Te pido que elijas ser el mejor aliado y el mejor entrenador para sentirte bien.
Vanda
Grasas?
No, Gracias!
Un poquito de todo
Un día, estando en un hotel all inclusive, vi cómo la mayoría de los huéspedes –estando ya visiblemente excedidos en su peso–, se servían, literalmente, “de todo”.